Alpes de Zillertal

Para nuestro próximo viaje a la montaña hemos elegido la zona de los Alpes de Zillertal. Tras una breve búsqueda encontramos aparcamiento gratuito en la escuela local, cerca de la estación de tren también encontramos una parada de autobús. Preparamos las cosas necesarias, nos cambiamos a zapatos de trekking, reponemos nuestros suministros de agua y tomamos el bus hacia Gerlos. Un cómodo autobús sube por las serpentinas aún más detrás de Gerlos hasta la presa de Durlassboden durante aproximadamente tres cuartos de hora.

Comienza a llover un poco, pero no se puede dispersar, porque tenemos hambre de otra aventura y, especialmente, según el pronóstico, el clima mejorará significativamente en las próximas horas.

Nuestro destino de hoy es la cabaña Zittauer Hutte a una altitud de 2300m.nm, que se encuentra a 4 horas a pie de la presa. Primero subimos un poco por un cómodo sendero ancho, que copia el lago de la presa, después de un rato nos escondemos de la lluvia y luego nos ponemos impermeables. La sección ensancha aún más el valle ligeramente y en el siguiente lago al final de la carretera hay un restaurante de cruceros. Aquí comienza una subida adecuada, que conduce a lo largo de un torrente tormentoso con varias cascadas interesantes hasta la siguiente etapa del valle.

Desde aquí se puede ver una casa de campo bellamente situada. Siguiendo un camino guiado audazmente, subimos a lo largo de la alta cascada que fluye desde nuestra cabaña. Al borde del escalón de la roca, comenzamos a cubrir la niebla.

Las nubes de niebla, sin embargo, están retrocediendo después de un tiempo y el paisaje circundante se abre en toda su belleza. Vemos un panorama increíble de los glaciares circundantes, y en un lugar llamado Gletscherblick también hay un panel de información que monitorea y describe de manera interesante el retroceso de los glaciares en las últimas décadas.

Cruzamos los primeros campos de nieve hasta Zittauer Hutrte. Está muy bien situado en el inusualmente grande lago Gerlossee.

Para hoy, sin embargo, tenemos suficiente con el calor agotador, por lo que aproximadamente 6 horas de viaje en automóvil y una caminata de cinco horas nos gusta usar la hospitalidad de la cabaña y terminar este gran día en sus entrañas y agregar los iones perdidos a la buena cerveza austriaca.

Mañana buscamos un viaje un poco más complicado ......

También me gustaría comentar en qué época solemos ir a los Alpes. Nunca hemos estado en los Alpes en temporada alta. es decir, julio o agosto. No queremos encontrarnos con multitudes de turistas, queremos disfrutar de las montañas en su belleza tranquila y tranquila. A menudo elegimos lugares aún más remotos y menos conocidos. Esto a veces puede dar lugar a complicaciones en forma de caminos intransitables o charlas cerradas. 

Los chalets que elegimos para esta caminata están abiertos solo por unos días y el ataque principal solo se experimentará en las próximas semanas y meses. 

Por la mañana, el cielo es azul celeste y, junto con el entorno circundante y los panoramas de los picos circundantes de XNUMX metros, se ve realmente fabuloso. Es el momento de echarse las mochilas a la espalda, preparar los bastones de trekking, apretar bien los cordones de los zapatos y partir. Nuestro destino hoy es la cabaña de Plauener, que debería estar a unas siete horas a pie. Entre ellos también se encuentra la cabaña Richter hutte, donde nos gustaría relajarnos a mitad de camino y continuar. 

En el camino, tenemos que superar algunos asientos de montaña y planear escalar el Monte Richterspitze, que está varios metros más adelante del 3000 M. Un poco más abajo está el Gamsscharte, que falta unos pocos metros para 3000.

El camino de Zittauer Hutte conduce primero a lo largo del lago y luego sube a la izquierda y más empinado hasta la silla de Roskarscharte. Se encuentra a una altitud de unos 2700 m sobre el nivel del mar y a poca distancia antes de poder girar hacia la montaña Rosskopf, que es de fácil acceso debido a su forma redonda. Delante de la silla hay otro campo de nieve y se abre una vista a otro valle, donde seguimos buscando en vano nuestro próximo destino. El cruce de Roskar Scharte es realmente empinado y es necesario dar un cierto paso en algunos lugares. A continuación, descendemos por campos de piedra y prados de montaña hasta un pequeño lago. 

Aquí nos regalamos un merecido descanso, un picnic con los suministros que llevamos a la espalda y también un refrescante baño de pies en el agua helada de una pequeña pelota. 

Detrás de este lago, la carretera gira a la derecha hacia el valle lateral y ya podemos ver nuestro próximo destino en el refugio Richter Hutte. Parece muy lejos a primera vista, bajamos un poco y perdemos los duros metros subidos. En algunos lugares, el sendero es muy aireado sobre toboganes rocosos, pero incluso estos lugares clave pueden superarse con seguridad con un poco de concentración. Aunque no me gustaría caminar sobre ellos en la nieve o los carámbanos. El camino nos llevará unos doscientos metros más abajo de la cabaña donde cruzamos un arroyo que brota en algún lugar del glaciar. Al superar un campo de nieve por debajo del cual fluye el arroyo, incluso hay una ruptura en la corteza de hielo y uno de nosotros cae al arroyo.

Afortunadamente, lo hace sin mayores complicaciones y el único recuerdo es un poco de mojado en los zapatos y muchas risas. Después de un rato volvemos a subir por la empinada acera de la cabaña Richter Hutte.

Hoy realmente tenemos bastante, estamos aquí en unas cinco horas y parece que tendremos al menos otras cinco horas. Nos refrescamos con el Radler de barril y averiguamos a dónde ir. El techo de la cabaña está siendo reparado por algunos techadores eslovacos y parece que esta cabaña actualmente está cerrada a los dormitorios.

Cuando inclinamos la cabeza para ver nuestro próximo objetivo, nos deja sin aliento. La silla de montar Gamscharte se encuentra a unos 700 metros sobre el nivel del mar. Por lo que vemos, el camino no será fácil y, lamentablemente, no será seguro. Está lleno de escarpados campos de nieve y no llevamos piolets y gatos con nosotros en la imaginación del próximo verano y las altas temperaturas.

Bueno, que no es otra opción, tenemos que llegar de alguna manera a nuestro próximo destino, donde ya tenemos una noche reservada. En este punto, me gustaría hacer un pequeño comentario para aquellos que no van a estas cabañas y los Alpes a hacer senderismo con mucha frecuencia. Cada vez que salga de una cabaña a otra, o salga de la cabaña para un viaje, es bueno inscribirse en el libro de excursiones.

Se encuentra cerca de la entrada de la cabaña o directamente en el restaurante y es bueno que escriba su nombre, su próximo destino y la fecha y hora de su salida. En caso de un evento inesperado y el servicio de montaña tenga que ocuparse de su supervivencia, esto puede ayudar mucho.

Después de un breve descanso, nos echamos a la espalda pesadas mochilas y subimos. Primero, vaya lentamente a lo largo del arroyo: lo cruzan y siguen una serie de serpenti empinadas. Aquí todavía va porque el camino pasa por tierra firme y seca. Un poco más adelante llegamos al primer campo de nieve, el siguiente tiene carácter de pista negra. En la práctica, esto significa que si se resbala, es probable que termine dando volteretas unos cientos de metros más abajo. Así que en caso de que no te detengas en el camino por una piedra. Y así subimos más y más alto sobre un terreno muy empinado. El campo de nieve a veces es reemplazado por morrena rocosa.

De repente llegamos a lugares donde ya no vemos señales turísticas. Las marcas esporádicas en el sillín todavía están bajo la nieve. Ahora tenemos un problema con la orientación. Que es claramente el objetivo por encima de nosotros, pero estamos pensando en cómo llegar a él de la forma más segura posible. Aquí ya estamos en el reino de la nieve y el hielo, por lo que zigzagueamos a una altitud de unos 2800 m en un campo nevado empinado y tratamos de vigilar cada uno de nuestros pasos.

Estamos todos aquí juntos, pero al mismo tiempo cada uno para sí mismo. Todos sabemos que si uno resbalaba el pie, nadie podía ayudarlo y su caída terminaría a unos 100 metros. Sin embargo, nos subimos sin aliento a la silla y estamos ansiosos por bombear la adrenalina que será mucho mejor detrás de él. Se suponía que los últimos metros a Scharte estaban asegurados con una cuerda de acero, desafortunadamente debido a la alta capa de nieve que está escondida en algún lugar debajo de ella, los últimos metros con los dientes apretados salto a la seguridad del terreno plano.

Ya no tenemos fuerzas ni ganas de bajarnos del sillín unas decenas de metros más en el Richterspitzre. Queremos estar detrás de las luces de la cabaña si es posible. Finalmente estamos aquí, por otro lado, la Vía Ferrata asegurada debe continuar. No vemos la primera seguridad desde aquí, así que nos vestimos con asientos, escondemos bastones de trekking para mochilas y sacamos mosquetones de seguridad. y nos ponemos cascos.

La primera protección se encuentra a unos 30 m detrás del sillín. Al principio, la carretera parece bastante factible. Qué felices estamos de hacer clic en la seguridad de acero después de pasos inciertos en campos de nieve empinados.

Ferrata no debería ser difícil. Tiene una clasificación de C, pero en estas condiciones y nieve puede resultar bastante interesante. Esto se confirma incluso después de unas pocas decenas de metros. porque las secciones bien aseguradas se alternan con lugares no seguros, lo que normalmente no sería un problema en una sequía. En la nieve, sin embargo, representan un aumento adicional de la frecuencia cardíaca y los niveles de adrenalina. Especialmente superar la zanja helada, bajo la que retumba el burbujeante arroyo, es una experiencia de adrenalina bastante interesante después de la experiencia anterior con el colapso del puente de nieve.

Esto es seguido por la seguridad de nuevo. Aquí está perfectamente hecho con muchos rizos y salientes, y debajo de él podemos finalmente ver un terreno firme. Así que si las llanuras nevadas pueden llamarse así.

Finalmente, barremos los últimos pasos y nos felicitamos por el límite de agotamiento que hemos dominado esta prueba sin ningún daño.

Hoy nos topamos con nuestro dormitorio sobre vastos campos de nieve. Solo una ligera pendiente desciende hasta la hermosa casa de campo Plauener. Está ubicado alto. . encima de otro embalse de presa llamado Zillergrund

Entonces, cuando hablamos de la cerveza, la experiencia de transitar la silla de montar y la ferraty es suficiente para reírse de ella. Ahora mismo te das cuenta de la belleza de las montañas y las experiencias compartidas con tus amigos. Los cuerpos ensangrentados yacen en un campamento común de matratzen, y en un momento estamos dormidos como si estuviéramos en el agua.

Por la mañana, estamos esperando un descenso abandonado hacia la presa del embalse, desde donde el autobús va a Mayrhofen. En dos horas y media caminando por el hermoso campo estamos en la parada.

incluso se abren inodoros gratuitos y como este lugar ya está bastante ocupado, el autobús está ocupado con bastante frecuencia

Primero se sumerge en un túnel excavado dentro de la montaña, luego entra por debajo de la presa y continúa por el río, que tiene el nombre de todo el valle, hasta el centro administrativo de Mayrhofen. 7

Aquí llegamos a la estación de tren y tomamos algunas paradas de regreso a Zell am Ziller.

Fue realmente hermoso a pesar de un exigente fin de semana extendido.